«Todavía nos queda mucho por descubrir, a pesar de los años que llevamos». Así se expresa el cronista del Puig e investigador Julio Badenes, después de su último hallazgo en la montaña de Santa Bárbara: una trinchera de grandes dimensiones de la que parten al menos once galerías, que fueron construidas por el Ejército republicano durante la Guerra Civil, dentro de la red de estructuras defensivas para proteger la ciudad de València del posible asedio de las tropas golpistas.

Tras años de estudio del patrimonio bélico, tanto en solitario como en equipo con José Aleixandre y Esteban Clemente, que se plasmó hace unas semanas con la publicación de un libro (ya está disponible la versión online y en breve se editará en papel), ahora ha localizado una nueva red de estructuras, en un punto diferente a los distintos núcleos que habían estudiado hasta la fecha.

Badenes confiesa que el grupo ya sospechaba que en esa montaña podía haber algún elemento y que él mismo recuerda de niño «haber visto algo parecido a un refugio lleno de agua por la lluvia». Pero fue en una excursión reciente cuando localizó este nuevo hallazgo, que se suma a un amplio catálogo de elementos defensivos en el término municipal, que forman parte de la línea Puig-Carassols, conocida popularmente como «la Inmediata».

El experto describe la nueva trinchera como un elemento de dos metros de profundidad que recorre la montana en más de 200 metros lineales, y del que parten «cada 10 o 15 metros» galerías que se adentran en la montaña. Se inicia en la cara de Santa Bárbara que mira al mar, por lo que «posiblemente se construyera para vigilar un desembarco». Badenes indica que, en la documentación que han manejado, no figuraba esta trinchera, «pero una cosa es lo que planearon y luego lo que en la práctica construyeron, como la experiencia ha demostrado». «Seguramente tuvieron que utilizar explosivos para una excavación como esta y puede que pretendirran hacer bóvedas de hormigón pero no llegaron a tiempo», lanza Badenes, como hipótesis.

Sin acción conjunta

Para el investigador, este nuevo descubrimiento confirma «la importancia que tiene el Puig en el contexto de la línea y la importancia de la propia línea» lo que ha de implicar la puesta en valor global «en todos los municipios».

Aunque los ayuntamientos que comparten esta red crearon una asociación de municipios para lograr ayudas que permitieran su rehabilitación y musealización (Badenes y los otros dos expertos forman parte de la comisión técnica), en la práctica aún no se ha actuado conjuntamente, más allá de algunas iniciativas municipales.

En el paso del Puig de Santa María, «hasta ahora todo se ha centrado en las visitas a las estructuras de la Muntanyeta de la Patà» pero la nueva trinchera localizada «abre el camino a plantear nuevas rutas», valora el cronista del Puig.